Ser sometido a un procedimiento quirúrgico no es una experiencia normal para la mayoría de nosotros. Consecuentemente, esta etapa del tratamiento es invariablemente acompañada por algún grado de ansiedad. Conocer todas las etapas del tratamiento puede constituir un camino para proporcionar más confort y tranquilidad. Lo principal, sin embargo, es seguir minuciosamente las orientaciones del médico en pos de un buen resultado.
A fin de cuentas, la satisfacción con los resultados de una cirugía plástica no depende apenas de su planificación. Algunos ciudadanos antes y después de la cirugía pueden prevenir posibles complicaciones y promover un resultado estético más satisfactorio. La colaboración plena del paciente, siguiendo las instrucciones dadas por el cirujano, y la acción de los profesionales de la salud tienen gran importancia en el resultado de la cirugía.
Algunos minutos antes de la cirugía, usted recibirá una ropa especial y un medicamento preanestésico para inducir el sueño, la amnesia y disminuir la ansiedad. Después de algunos minutos, será dirigido al centro quirúrgico, donde se encontrará con el anestesista y los demás miembros del equipo (enfermeras y cirujanos). Cuando entre en el salón de operaciones, el equipo hará de todo para garantizar su comodidad y el anestesista iniciará los procedimientos de anestesia y monitorización para su seguridad durante la cirugía.
Después de concluir la cirugía y las curaciones, usted será dirigido a la sala de recuperación. En esta unidad, que debe poseer una infraestructura completa, usted permanecerá bajo monitoreo y será constantemente examinado por un equipo de especialistas buscando garantizar una recuperación suave de la anestesia. Factores como la hidratación, el control del dolor, la temperatura corporal y la función respiratoria deben ser rigurosamente evaluados. La mayoría de los pacientes tienen condiciones de alta de la sala de recuperación después de 30 a 60 minutos. En el cuarto, su recuperación será supervisada por el equipo de enfermeras y por el equipo médico a través de visitas frecuentes y regulares.
ALTA MÉDICA
El tiempo de ingreso, que normalmente varia de 12 horas a 2 días, depende del tipo de cirugía realizada, de la ocurrencia de complicaciones y de la respuesta individual de cada paciente al procedimiento. La permanencia en el hospital por más tiempo puede ser necesaria, aunque esto sea poco frecuente. Independientemente de ello, el alta médica debe ocurrir solamente cuando el paciente presenta plenas condiciones de salud. Por ende, ¡no tenga prisa!
Al recibir el alta, no se olvide de organizar la presencia de un adulto responsable para manejar y acompañarlo. Marque la fecha del regreso al consultorio, donde el cirujano supervisa su proceso de recuperación. En caso de duda, llame inmediatamente al equipo médico.
Debido a la actual necesidad de pronto restablecimiento de los pacientes y el control del resultado de la operación, los cirujanos buscan la actuación multidisciplinaria de profesionales también en el posoperatorio. La esteticista de nivel superior y la fisioterapeuta dermatofuncional actúan en la recuperación de las funciones del cuerpo humano, en la prevención de posibles inconvenientes y amenizando los efectos de la cirugía, como edema, hematoma, seroma, cicatrización, dolor e incomodidad.
La recuperación de una cirugía depende básicamente del tipo de operación y de la reacción del organismo, que varía entre las personas. Cada paciente tiene necesidades, expectativas individuales y una recuperación fisiológica patrón. Estos pueden ser influenciados por la genética, rutina, período de vida cronológico y emocional, entre otros factores variables.
El principal tratamiento posoperatorio es la búsqueda del control del edema (hinchazón) y moretones que aparecen inevitablemente después de las cirugías. El planeamiento del tratamiento en el posoperatorio es ampliamente variable y depende de las características presentadas en la evaluación del tipo de cirugía realizada, la región corporal operada, la técnica utilizada, el tiempo de posoperatorio, para entonces identificar de qué manera se puede mejorar el curso de los acontecimientos.
Un protocolo de tratamientos posoperatorios adecuado es de extrema importancia para la recuperación del paciente. El uso combinado de terapias como drenaje linfático, ultrasonido, Vacuodermobilización, microcorrientes, termoterapia, vacuoterapia, y otros adecuados a cada caso hacen que el cuerpo reaccione mejor, facilita el modelaje facial y corporal, mejora la cicatrización y acelera su recuperación.
La interacción del cirujano plástico y del terapeuta en la atención al paciente ocasionará un mejor control sobre las reacciones posoperatorias.
El apoyo de la familia y de los amigos es fundamental durante el periodo de tiempo de recuperación. Sin embargo, ocasionalmente escuchará comentarios de personas desconocedoras que, a pesar de no ser intencionadas, pueden causar algún grado de inestabilidad emocional. Por tanto, trate de confiar en la capacidad y experiencia de su cirujano – él debe informar honestamente sobre su progreso y las expectativas en términos del resultado final.
La sensación de “depresión” es relativamente común durante el periodo inicial después de la realización de una cirugía plástica, debido a las alteraciones ocasionadas por la hinchazón y los moretones. Además, después de la cirugía, muchos pacientes esperan una mejoría instantánea de su apariencia, aunque racionalmente sepan que esto no sucederá.
Consecuentemente, pueden surgir dudas en relación a la decisión de haberse sometido al procedimiento. Relájese, ¡eso es normal! A medida que la cicatrización avance, estos pensamientos tienden a desaparecer rápidamente. Si siente tristeza, trate de entenderlo como una fase natural del proceso de recuperación – es una fase transitoria, que pasa rápido.